Según la estadística en poder de la consejería, en el curso 2010-2011 aumentaron el mobbing y las ''conductas desafiantes'' hacia los docentes.
Un 20% ha denunciado presiones a través de grabaciones, fotos o internet.
El 60% presentaba un cuadro de ansiedad y el 17% de depresión.
El pasado curso escolar 2010-2011 se produjo un considerable aumento de casos de acoso y presiones contra los docentes en el desempeño de su labor en los centros de Castilla-La Mancha. Según los datos de los que dispone la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, también, en ese mismo curso escolar, se produjo un aumento significativo de los casos de mobbing, un incremento exponencial del deterioro de las condiciones de trabajo, del clima de convivencia y de las llamadas ''conductas desafiantes'' hacia los docentes.
Estos datos explican, según el consejero Marcial Marín, ''la necesidad urgente de que se ponga en marcha la Ley de Autoridad del Profesorado, que respaldará, protegerá y defenderá a los docentes de Castilla-La Mancha, que hasta ahora han ido viendo como su figura se iba minusvalorando sin que nadie hiciese nada''.
Según los mencionados datos, en el curso 2010-2011 hubo un aumento en los problemas de disciplina, falta de respeto, desobediencias y casos de cuestionamiento de la capacidad profesional de los docentes. También crecieron las conductas desafiantes injustificadas por parte de los alumnos y padres/madres relacionadas con la percepción de baja autoridad del profesorado.
Todos estos datos están incluidos en un estudio sobre la autoridad del docente que obra en poder de la consejería, en donde, además se arrojan algunas cifras.
En el pasado curso escolar, en el apartado de ''estado anímico'' que reflejaban los docentes, del total de llamadas recibidas, un 60% de las mismas reflejaban cuadros de ansiedad en los docentes; un 17% eran casos de depresión; y un 15% por baja laboral.